Krystall Rally: sólo para los moteros más valientes

Principios de Febrero, Noruega. Temperaturas que rondan los -25 grados centígrados y carreteras y calles llenas de nieve. Una situación climatológica que, a primera vista, podría no ser la más adecuada para conducir una moto o hacer largos viajes. Sin embargo, estas duras condiciones no detienen a cientos de moteros que, cada año, se reúnen en el país nórdico para celebrar una nueva edición del Krystall Rally. Sin duda, una de las concentraciones moteras de invierno más duras y complicadas, pero también de las más interesantes.

En sus inicios, la concentración noruega reunía a alrededor de 50 moteros, pero en las últimas ediciones la participación ha llegado hasta las 200 personas. Este dato contrasta enormemente con los de otras concentraciones que se celebran en el continente europeo a lo largo del año y que consiguen reunir a miles de aficionados a las motos. Sin embargo, por ese mismo motivo se considera un evento especial y más purista.

Krystalrallie

La primera edición se celebró en el año 1970 en la ciudad de Femundsenden (cerca de la frontera con Suecia), y fue impulsada por el noruego Morten Mager, quien quería tener una versión de la famosa Elefantentreffen (celebrada en Alemania) (link) en su propio país. Comenzó como un rally en el que los participantes llegaban desde diferentes puntos de salida, y acababan en el mismo lugar, que servía de punto de reunión y celebración. A pesar de concebirse en un principio como un evento puntual, a partir de ese momento se fue celebrando anualmente, y pasó por diversas ciudades de Noruega como Savalen, Rondane, Spidsbergseter o Beitostølen. Sin embargo, en el año 1974 la cita tuvo que ser cancelada debido a la dureza de la crisis del petróleo. No fue hasta dos años después que Kristal Rally volvió a ser celebrado como en sus orígenes, siendo organizado en dicha ocasión por el motero Leif Arnesen.

La dureza de esta concentración hace que la mayoría de los que se animan a participar vayan en sidecar, siendo solo unos pocos valientes los que van en moto y equipados, preferiblemente, con neumáticos de invierno con clavos. Por ello, se ha convertido en una concentración de referencia para los conductores de sidecars. Los más atrevidos, además, se alojan en tiendas de campaña, mientras que el resto optan por cabañas o apartamentos.

La dura climatología, el estado de las carreteras y un número de asistentes no muy alto hacen de este evento las delicias de los moteros, pero pocos son los que se atreven a desafiar al frío invierno del país nórdico. ¿Y tú, has sido uno de ellos? Cuéntanos tu experiencia. 🙂

Llevar niños en moto: normativa y precauciones

Piénsalo durante unos segundos: ¿sabrías decir si está permitido llevar a un niño como pasajero en una moto? Si es así, ¿a partir de qué edad? ¿En todo tipo de motos? ¿Se han de cumplir otros requisitos? ¿Cuáles?

Quizá no sepas la respuesta a ninguna de estas preguntas o no estés muy seguro de qué condiciones se han de cumplir. Por eso, si te planteas usar tu moto como medio de transporte para llevar a tu hijo, por ejemplo, a diario al colegio, debes tener en cuenta varios aspectos muy importantes, no sólo para evitar multas o problemas con el seguro, sino por la seguridad y educación vial del pequeño.

El artículo 12 del Reglamento General de Circulación, que se encuentra incluido en la Ley de Tráfico, establece lo siguiente:

“2. En los ciclomotores y en las motocicletas, además del conductor y, en su caso, del ocupante del sidecar de éstas, puede viajar, siempre que así conste en su licencia o permiso de circulación, un pasajero que sea mayor de 12 años, utilice casco de protección y cumpla las siguientes condiciones:

  1. a) Que vaya a horcajadas y con los pies apoyados en los reposapiés laterales.
  2. b) Que utilice el asiento correspondiente detrás del conductor. En ningún caso podrá situarse el pasajero en lugar intermedio entre la persona que conduce y el manillar de dirección del ciclomotor o motocicleta.
  3. Excepcionalmente, los mayores de siete años podrán circular en motocicletas o ciclomotores conducidos por su padre, madre o tutor o por personas mayores de edad por ellos autorizadas, siempre que utilicen casco homologado y se cumplan las prescripciones del apartado anterior (artículo 11.5 del texto articulado).”

 Así, se han de tener en cuenta varios aspectos que desglosamos a continuación:

La edad

En primer lugar debes tener clara la edad mínima permitida. En este aspecto, el Reglamento General de Circulación es muy conciso: el niño debe tener 12 años o más. Eso sí, se establece una excepción: los niños de a partir de 7 años también podrán ir de pasajeros en la moto si quién conduce es su padre, madre, tutor o una persona mayor de edad autorizada por ellos.

niñomoto

La homologación de la moto

Para llevar a un adulto como pasajero la motocicleta debe estar homologada para ello, y lo mismo ocurre en el caso de los niños. Se puede comprobar si la moto cumple dicho requisito en el propio permiso de circulación, en el apartado S.1. que indica el número de plazas con asiento. Si aparece el número 2, entonces dicha moto está homologada para llevar un pasajero, mientras que el número 1 permite que únicamente vaya el conductor.

La posición del niño

El menor debe ir siempre a horcajadas y con los pies apoyados en los reposapiés laterales, sin excepción. Además, ha de ir siempre situado detrás del conductor y nunca entre el mismo y el manillar, ya que puede limitar los movimientos y ser más peligroso en caso de accidente.

Elementos de seguridad

Por supuesto, no puede faltar un casco homologado y de la talla adecuada. Además, es recomendable llevar chaqueta y guantes, para evitar heridas en caso de accidente. Existen también asientos especiales para niños, que comercializan algunas marcas.

Por último, no debes olvidar tampoco tu seguro de moto; es recomendable que incluya cobertura para los acompañantes. Debes, además, practicar una conducción segura y respetuosa, ya que influirá en el comportamiento vial futuro del niño.

¿Cuántos tipos de carnet de moto existen?

En la actualidad existen 4 tipos de carnet diferentes que permiten conducir distintos tipos de motos o ciclomotores, cada uno de ellos con sus propias particularidades. Se trata de un sistema de acceso progresivo a la moto en el que la experiencia juega un papel fundamental, evitando así que un conductor pueda usar una moto de gran cilindrada o gran potencia nada más adquirir su primer carnet.

Autoescuela

A continuación, te explicamos los distintos tipos de permisos y sus peculiaridades:

  • CARNET AM

El anteriormente denominado como licencia de ciclomotor y que con el nuevo reglamento pasó a llamarse Permiso de conducir AM. Permite conducir vehículos de hasta 50 cc de cilindrada. Otro cambio que trajo consigo esta normativa fue el cambio en la edad mínima permitida: de 14 a 15 años. Además, sólo se podrá llevar pasajero si el conductor tiene más de 18 años y ha homologado el ciclomotor para ello.

Para obtener este carnet, se debe realizar un examen teórico de 20 preguntas (se permiten como máximo 2 fallos) y un examen práctico en un circuito cerrado.

  • CARNET A1

Permite conducir motocicletas de una potencia máxima de 11 kW y de 125cc cuya relación potencia/peso no supere el 0,1 kW/kg. Autoriza además a llevar triciclos de motor de hasta 15 kW de potencia. La edad mínima permitida son los 16 años.

Para obtenerlo, se debe superar un examen teórico de 30 preguntas y un examen práctico dividido en dos fases: la primera, a realizar en un circuito cerrado, y la segunda, a realizar en la vía pública durante aproximadamente 25 minutos.

  • CARNET B

Se trata del carnet que autoriza a conducir coches, pero su obtención implica también (con un mínimo de 3 años desde su fecha de expedición) la autorización para conducir motos de hasta 125 cc y triciclos de motor de hasta 15 kW. Es decir, puedes conducir el mismo tipo de motos que las que autoriza el carnet A1.

  • CARNET A2

 Autoriza a conducir motos de hasta 35 kW (sin superar el doble de su potencia, es decir, 70 kW de serie) y con una relación potencia/peso que no supere los 0,2  kW/kg, y triciclos de hasta 15 kW. La edad mínima son los 18 años.

Para obtenerlo, se ha de realizar el mismo examen teórico que para el carnet B de coche y un examen teórico específico, aunque quienes que ya los hayan obtenido previamente no necesitarán repetir la prueba. Después, se ha de realizar un examen práctico en un circuito cerrado y otro en la vía pública.

Si quieres leer más información sobre el permiso A2, y una explicación detallada de la normativa al respecto, visita nuestro post “Conducir motos con el carnet A2: Qué debes saber.”

  • CARNET A

Este carnet autoriza a conducir cualquier tipo de moto sin ninguna limitación de potencia. Es obligatorio estar en posesión del carnet A2 un mínimo de 2 años, siendo así la edad mínima los 20 años. También autoriza a conducir triciclos de motor de 15 kW hasta los 21 años y, a partir de esa edad, de más de 15 kW.

Para su obtención, se debe realizar un curso de formación de 9 horas de duración, que consta de una parte teórica y una parte práctica en circuito cerrado y en vía pública.

Elefantentreffen: La fría Alemania acoge cada año a miles de moteros

Elefantentreffen (nombre en alemán), Elephant Rally (en inglés) o Elefantes, es una importante concentración motera de carácter anual que se celebra en Alemania a principios de año, habitualmente durante el último fin de semana de enero o el primero del mes de febrero, y que reúne a varios miles de amantes de las motos.

Las ciudades de Thurmansbang y Solla, situadas en el Valle de Loh en el Bosque de Baviera y muy cercanas a la frontera con la República Checa, sirven como punto de encuentro para todos los aficionados que esos días deciden acercarse a este encuentro invernal, organizado desde hace varios años por la Asociación Federal de Motociclistas de Alemania.

Su primera edición tuvo lugar en una pista de carreras cerca de la ciudad de Stuttgart en el año 1956, y fue organizada por el periodista del mundo del motor Ernst Leverkus. En aquella ocasión se celebró una concentración únicamente orientada a motocicletas de sidecars KS 601, también denominadas de forma popular como ‘elefantes verdes’. De ahí, el nombre que más tarde adquirió el evento: Elefantentreffen. No fue hasta dos años más tarde cuando se comenzaron a admitir otros modelos de motos, ayudando a la expansión e internacionalización del encuentro.

Durante los siguientes años, Elefantentreffen fue pasando por diversos circuitos y ciudades alemanas, como Nürburgring o Salzburgring, hasta que en el año 1989 se instaló de forma definitiva en el lugar actual: en el conocido estado de Baviera, situado al sureste de Alemania.

Por supuesto, al tratarse de una concentración invernal en un país del centro de Europa, la nieve suele ser otra de las grandes protagonistas, que además, supone un reto para mucho de los moteros de países más cálidos no tan acostumbrados a conducir en tales condiciones. Entre 5.000 y 10.000 motoristas acuden anualmente desde diversos puntos de Europa, a pesar de las bajísimas temperaturas, que siempre se encuentran bajo 0. Sin embargo, el viento y la nieve hacen que la sensación térmica oscile entre los -10 y los -30 grados centígrados.

ELEFANTENTREFFEN

La entrada suele rondar los 25 euros y permite acceder a la zona de camping y de encuentros. Los coches se encuentran totalmente prohibidos y, a pesar de que se trata de una de las citas europeas más importantes, es una de las concentraciones más ‘tranquilas’ y ‘austeras’, puesto que no encontraremos en ella grandes conciertos, actuaciones ni aglomeraciones. Es, por tanto, un evento purista donde los únicos protagonistas son el motero y su moto.

Por último, cabe destacar que los elefantes son el origen de la procesión de antorchas que se celebra en tantas concentraciones moteras de Europa, y que sirve para homenajear a aquellos moteros que han muerto durante el último año en las carreteras. En el caso de la concentración alemana, se procede a leer un texto en diversos idiomas y a recordar uno a uno a los fallecidos, seguido de un minuto de silencio y una misa en una capilla de la localidad más cercana.

Y vosotros, ¿habéis tenido ya la suerte de poder asistir en alguna edición al Elefantreffen o entra en vuestros planes más próximos? Esperamos vuestros comentarios, experiencias y recomendaciones. 🙂